Salud es lucha, dicen mujeres afectadas por represas

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Salud es lucha, dicen mujeres afectadas por represas

  Foto: Mídia Ninja La vida cotidiana de las mujeres afectadas por represas en el estado de Minas Gerais es de lucha. Lucha por la sobrevivencia, por los hijos, por […]

Publicado 04/11/2019

Foto: Mídia Ninja

La vida cotidiana de las mujeres afectadas por represas en el estado de Minas Gerais es de lucha. Lucha por la sobrevivencia, por los hijos, por los padres y por sus parejas. Lucha contra las violaciones de derechos realizadas por las empresas criminales Vale, Samarco, BHP Billiton y Fundação Renova.

Durante el Encontro dos Atingidos (Encuentro de Afectados), en la Arena de Mariana, ellas pudieron hablar sobre sus problemas y la resistencia en el día a día. Relatos sobre contaminación, adición al uso de drogas y alcohol, suicidios y dificultades de acceso al mercado laboral fueron compartidos a lo largo de la mañana del lunes 4.

Según Letícia Oliveira, del Movimento dos Atingidos por Barragens (Movimiento de los Afectados por Represas, MAB), las mujeres son las mayores víctimas de los crímenes provocados por represas en Brasil y en el mundo. Al momento en que Letícia preguntó cuáles mujeres presentes allí en el encuentro ya habían cargado baldes de água en la cabeza para llevárselos a la familia, muchas de ellas levantaron los brazos.

Foto: Mídia Ninja

“Cuando las empresas destruyen nuestros ríos y la naturaleza, hay falta de agua. Las empresas dicen que la falta de agua se debe a la falta de lluvia o problemas en la región, y sin embargo para los ricos siempre hay agua. El acceso al agua es solo uno de los muchos derechos que se les niegan a las mujeres”, dijo.

Los problemas de salud generados por los delitos de minería son algunos de los principales sufridos las mujeres afectadas. Responsables por el cuidado de sus familias, tienen dificultades para acceder a las políticas públicas, cada vez más menospreciadas por el actual gobierno de Brasil.

“Ya no existen los programas Farmácia Popular, Mais Médicos, los programas de prevención del embarazo de adolescentes y otros. Hay un desmantelamiento en el SUS (Sistema Único de Saúde, que oferta salud universal publica y gratuita en Brasil), además de la precariedad laboral y el final de la jubilación publica, recientemente aprobado. Todo esto se refleja también en la salud de las personas afectadas, porque la salud es mucho más que médicos, remedios y análisis clínicos”, observa José Geraldo Martins.

Maria Lindalva, de Baguari, districto de la ciudad de Governador Valadares, dice que la comunidad no fue reconocida como afectada por la Fundação Renova después de cuatro años del crimen. “Dicen que no fuimos afectados, pero después del colapso de las represas tenemos muchas enfermedades allí. Dicen que tenemos que darles laudos médicos, pero los médicos no nos dan”.

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El municipio de Brumadinho vive casos graves de enfermedad mental. Miquéia Ribeiro, del MAB en la región, dice que hubo un aumento en la tasa de intentos de suicidio en las escuelas. “Tales ocurrencias aumentaron mucho, y la depresión de las personas también aumentó. Se apegan a medicamentos, todo el tiempo las personas visitan el CAPS (Centro de Apoyo Psicológico y Social), y la ciudad incluso tuvo que contratar más profesionales y psicólogos”, se preocupa.

Pero hay esperanza, y la investigadora Dulce Maria sabe dónde encontrarla. “Necesitamos ser muy fuertes. Y si hay alguien en el país que sepa cómo construir esperanza, son las mujeres, las mujeres del MAB”, dice ella. Profesora de la Universidade Federal de Ouro Preto (UFOP), Dulce realizó una investigación en las regiones afectadas por la represa Fundão y asegura que la contaminación por metales pesados es un riesgo para la salud de toda la población.

Ella confiesa que ve en la lucha del movimiento una contribución importante a Brasil. “Las mujeres de MAB están ayudando al país y al mundo a comprender que para las empresas no valemos absolutamente nada. Después de estos años de lucha, hay muchos más médicos y personas en las universidades que lo reconocen, ahora es el momento de seguir luchando”, invita Dulce.

Sin dudas. Es así que las mujeres siguen luchando, con ganas, en las calles y en sus hogares. Son mujeres afectadas y defensoras de la vida.

Tradução: Diego Silveira

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