INVITACIÓN | Conferencia de prensa y volanteo informativo por la presentación con vida del defensor de la tierra Vicente Suástegui.

Punto de concentración: Zócalo de Acapulco, Gro.
🗓 13 de agosto de 2021
Hora: 11 am.

Vicente Con Vida

CECOP, TRECE AÑOS EN RESISTENCIA CONTRA LA PRESA LA PAROTA

CECOP,  TRECE AÑOS EN RESISTENCIA CONTRA LA PRESA LA PAROTA  

– I –

 Organización y respuesta contra el despojo

 Trece años de resistencia en contra del Proyecto Hidroeléctrico Presa La Parota se cumplirán el 28 de julio de 2016; durante ese tiempo se ha templado el Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la Presa la Parota (CECOP) para continuar la lucha sin desmayo hasta lograr la Cancelación Definitiva del proyecto.  Desde ese día emprendimos la defensa de nuestras tierras, el agua del río Papagayo y nuestro territorio que el gobierno trató de arrebatarnos para construir, sin nuestro consentimiento, esa megapresa que habría inundado 17,300 has., desalojado a 25 mil campesinos -comuneros y ejidatarios- y desertificado las tierras de quienes viven río abajo que son más de 80 mil, en un proyecto depredador que abarcaba cinco municipios del estado de Guerrero siendo Acapulco al más afectado en tanto que ahí planearon construir la cortina de la presa y el que tendría el mayor número de desplazados, principalmente comuneros de los Bienes Comunales Indígenas de Cacahuatepec, territorio constituido por 47 comunidades; 20 de ellas serían las más afectadas además de los 19 ejidos ubicados río arriba.

Ese 28 de julio de 2003, se detuvo a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) -para ese entonces empresa paraestatal promotora del proyecto- se le dijo que fuera a hacer su presa a otro lado y que sacara la maquinaria con la que habían iniciado los trabajo seis meses antes, lo que se vio obligada a hacer poco después; de ahí hasta ahora no logró meter nuevamente la maquinaria ni dar inicio a la construcción de la presa. Intentó hacerlo varias veces lo que le fue impedido por los pueblos que, para taparle el paso, instalamos plantones en los caminos que conducían a donde habían iniciado los trabajos; los plantones se instalaron en los cerros, en la entrada de los pueblos o junto al río, fueron 7 plantones resguardados día y noche durante cinco años sobre todo por las compañeras mujeres. Esta acción significó nuestra mayor fortaleza.  La CFE intentó pasar varias veces pero fue repelida, ejecutó  innumerables actos de provocación lo que generó un estado de constante confrontación además de que rompió el tejido social en el comunal y en los ejidos. La organización alcanzada por el CECOP frenó las provocaciones pero durante ese período cuatro compañeros fueron asesinados y once de nosotros estuvimos presos, llegando al encarcelamiento durante varios días de Marco Antonio Suástegui  y de don Francisco Hernández (don Chico) quienes fueron liberados por la fuerza que había alcanzado el movimiento.

Al haber tomado conciencia de que la posesión de las tierras es de los comuneros y ejidatarios y, como decía Doña Margarita, a quien llamábamos la Comandanta: “en nuestras tierras mandamos nosotras y nosotros”, se llegó al convencimiento que para sostener y triunfar en una lucha por el territorio se tiene que tener la posesión y el dominio del territorio. Igualmente importante fue adquirir la confianza en las propias fuerzas, además del convencimiento de que a nosotros y solamente a nosotros nos toca defender nuestras tierras; nadie va a venir a defender lo que a nosotros toca, porque las tierras son nuestras. También aprendimos a enfrentar a las fuerzas represoras, siempre convencidos de que estamos luchando por algo justo que es la defensa de nuestras tierras, el agua y la vida en comunidad. Supimos lo que es enfrentar la violencia de estado y salimos adelante. Nos rodeamos de solidaridad de muchos movimientos y organizaciones hermanas y supimos que nos asiste la razón y que tenemos derechos que deben ser respetados por el Estado. Emprendimos acciones legales en el terreno del derecho ambiental y del derecho agrario; en este último ganamos la nulidad de las asambleas agrarias fraudulentas por medio de las cuales pretendieron iniciar el proceso expropiatorio y el cambio de uso del suelo. Este triunfo legal sigue vigente, por lo que legalmente la CFE y el gobierno están impedidos a iniciar trabajos de la presa La Parota, pero sobre todo están impedidos por la decisión de los pueblos y la fuerza del movimiento.

Hicimos visible nuestro movimiento a nivel nacional e internacional. Recibimos la visita de relatores de la ONU y de la Sria. Gral. de Amnistía Internacional; denunciamos las agresiones sufridas ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en Washington y dimos nuestro testimonio frente al Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas (Comité DESC) en Ginebra, Suiza. Estos organismos internacionales emitieron recomendaciones muy duras al Estado Mexicano, todo en favor de nuestros derechos como campesinos y como pueblos indígenas.

En posteriores escritos expondremos con detalle los distintos momentos de la resistencia, los procesos legales que emprendimos, la represión, la violación de nuestros derechos humanos, las acciones en defensa del territorio y del medioambiente así como las acciones mutuas de solidaridad con organizaciones y movimientos sociales. La integración con afectados por presas en México y Latinoamérica, la formación del Movimiento Mexicano de Afectados por las Presas y en Defensa de los Ríos (MAPDER), la integración a la Red Latinoamericana de Afectados por Represas (REDLAR), la participación en la Asamblea Nacional de Afectados Ambientales (ANAA), en la Red Nacional de Resistencia Civil, el Comité Nacional por la Libertad de los  Presos Políticos, la Alianza Mexicana por la Autodeterminación de los Pueblos (AMAP), la Red Mexicana de Acción Frente al Libre Comercio (RMALC), la Campaña Nacional en Defensa de la Tierra y el Territorio y con otros grupos y redes.

Es urgente iniciar un proceso de intercambio de opiniones y propuestas con todos estos movimientos y otros más sobre la situación actual en México y a nivel global en un momento en que, para nosotros, significa un retroceso en todos los niveles. Este momento de crisis generalizada, es cien veces peor que cuando iniciamos nuestra resistencia hace 13 años. Hoy estamos mucho más desprotegidos que antes. Los últimos gobiernos, sobre todo el actual nos han arrebatado nuestros derechos más elementales, los han borrado de la misma Constitución que ha quedado modificada en favor de las empresas depredadoras. Las acciones y compromisos del Estado Mexicano y su gobierno ya no son para proteger al pueblo sino para resguardar los intereses de los negocios de las empresas y los empresarios -como patrones que son de los gobernantes- que lo único que buscan es la acumulación de su riqueza y la multiplicación de sus capitales.

Debemos estar preparados y alertas para cuando comiencen a entrar las empresas, sobre todo trasnacionales a extraer petróleo, gas por medio del fracking y a generar electricidad, y comiencen a ejecutar el despojo de tierras de campesinos e indígenas, amparados esos empresarios por las modificaciones de Peña a la Constitución como parte de la contra-reforma energética y sus leyes secundarias, que consideran a la extracción de hidrocarburos y generación de energía eléctrica como prioritarias, por encima de cualquier otra  actividad, ya sea agrícola o de cualquier otro tipo de uso del suelo, por medio de figuras tales como el derecho de paso y servidumbre oficial dando legalidad a la desposesión y el despojo.

Debemos medir la fuerza y dar un nuevo ímpetu a nuestros movimientos frente a un gobierno autoritario y represor que ha decidido emprender una guerra implacable contra los trabajadores, los campesinos y los pobres de todo el país. Estas medidas gubernamentales generarán conflictos cada vez más graves a partir de la imposición de las contra-reformas, como la embestida que lanzaron contra los maestros, particularmente de la CNTE, a quienes pretenden imponer la contra-reforma educativa que vulnera sus derechos laborales utilizando la fuerza desmedida del Estado. En el mismo nivel están colocadas las violaciones a los derechos humanos a través de las ejecuciones extrajudiciales, de la tortura sistemática y generalizada, y las desapariciones forzadas cuyo caso más grave es la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa. En los siguientes escritos, el CECOP expondrá su posición y propuestas frente a la crisis actual a la vez que seguiremos haciendo un recuento y rememoración los 13 años de lucha ejemplar en defensa de la tierra, el territorio, el agua y nuestros Bienes Comunales.

CONSEJO DE EJIDOS Y COMUNIDADES OPOSITORES A LA PRESA LA PAROTA (CECOP)

http://www.imdec.net/cecop/

Presa La Parota: violación de derechos humanos.

RompevientoTV, 30 junio, 2014

En esta emisión, Alberto Solís entrevista en el estudio de rompeviento a Abel Barrera e Isidoro Vicario, director y abogado del Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan, respectivamente; Vicente Suástegui, Mariluz y Esmeralda, del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Presa La Parota; y Kenia Hernández, del Centro de Derechos Humanos Costa Chica Naxcwe. Programa transmitido el lunes 30 de junio de 2014 a las 8 y 11pm.

A 9 años, la lucha en La Parota sigue

by Analisis_Prodh

A nueve años de haber iniciado el movimiento de resistencia contra el Proyecto Hidroeléctrico Presa La Parota, que el gobierno mexicano trató de imponer ejerciendo la violencia de Estado como método coercitivo, el Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la Presa La Parota (CECOP), reafirmó, en un comunicado, su decisión de seguir defendiendo la tierra, el territorio, el agua, la biodiversidad y, sobre todo, la posesión comunitaria de las tierras, la autonomía y la autodeterminación de los pueblos: “Nuestra lucha sigue y seguirá firme hasta lograr la cancelación definitiva del Proyecto Hidroeléctrico Presa La Parota”.

Bajo la premisa de que la tierra no se vende, el movimiento continúa obteniendo frutos estratégicos. El más importante es, por supuesto, haber impedido la construcción de la presa, que afectaría irremediablemente el entorno ecológico y social. Sin embargo, la lucha ha sido difícil. En el año 2005, por ejemplo, se concentró la mayor violencia en el conflicto, por el hostigamiento de la Comisión Federal de Electricidad y el gobierno del estado de Guerrero, quienes destruyeron el tejido social de las comunidades por medio de la fuerza policiaca, la repartición de dinero y la impunidad, que incluso, llevó a la muerte de tres integrante de la CECOP.

La lucha por la defensa de La Parota también ha acarriado la criminalización de la protesta social y de la defensa de los derechos humanos. En 2004, fueron libradas seis órdenes de aprehensión contra los dirigentes de la CECOP, algunos de los cuales permanecieron encarcelados y luego estuvieron sujetos a juicio, obligados a firmar cada ocho días en el reclusorio durante cuatro años.

Por otra parte, el gobierno se ha encargado de realizar asambleas fraudulentas, donde se falsifican firmas, incluso, de personas que ya han muerto. Un ejemplo de esto es lo sucedido el 14 de agosto de 2005, cuando los líderes de la Confederación Nacional Campesina (CNC), con financiamiento de la CFE y apoyo de 1,300 policías, realizaron una asamblea que terminó en un fuerte enfrentamiento entre los campesinos opositores y las fuerzas de seguridad.

No fue sino hasta principios del año 2007 que el Tribunal Tribunal Unitario Agrario No. 41 con sede en Acapulco, Guerrero, declaró nulas las asambleas realizadas por el gobierno, dejando al descubierto la ilegalidad con la que se pretendía obtener los permisos para iniciar el proyecto La Parota: “La anulación de estos mecanismos fraudulentos, respaldados además con la fuerza policiaca, desnudaron la actuación ilegal del gobierno mexicano y la simulación jurídica que utilizan sistemáticamente como método para imponer los megaproyectos de las empresas trasnacionales no importándoles las agresiones y la violación a los derechos de los pueblos”.

Las Sentencias de nulidad del Tribunal Agrario sobre las asambleas de 2005 significan un gran triunfo del CECOP. Sin embargo, el 28 de abril de 2010, en la comunidad de La Concepción en los Bienes Comunales, realizaron una nueva asamblea con los mismos métodos y con 800 policías doblemente armados, con capuchas, pasamontañas y armas de alto poder que impidieron el acceso de los campesinos, los que fueron suplantados por taxistas. El 19 de abril del 2011, el Tribunal Unitario Agrario No. 41 también declaró nula esta asamblea; sin embargo, la lucha sigue y seguirá, hasta que las personas dueñas de las tierras sean libres de utilizarlas y vivirlas como así lo quieran.

La Parota en el Día Mundial de Acción contra las Represas

Laurasalas, 15 marzo 2011

El Gobierno Mexicano trata de imponer, desde el 2003, una inmensa presa hidroeléctrica al sur de Acapulco, en el estado de Guerrero, México. Desde hace 8 años, los campesinos, organizados en el Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la Parota (CECOP) resisten firmemente a través de la vía legal y pacifica. Este 13 de diciembre, un día antes del Día Mundial de Acción contra las Represas, las comunidades hicieron un acto para refrendar la voluntad de defender sus tierras. El gobierno mexicano quiere imponer el proyecto sin informar y menos consultar a los afectados. La presa afectaría a 21 comunidades, de las cuales 17 son ejidos y 3 son bienes comunales (sistemas de propiedad colectiva de la tierra heredados de la Revolución Mexicana, que garantizan que la tierra quede en manos de los campesinos). La Parota sería una de las más grandes del mundo. Inundaría 17 mil 300 hectáreas de tierras fértiles y productivas. Más de 100 mil personas quedarían afectadas por la presa. De manera directa, 25 mil personas tendrían que ser desplazadas porque sus tierras quedarían bajo el agua. De manera indirecta, unas 75 mil personas estarían afectadas por el desvió del río: sin agua para irrigar sus tierras y para vivir. Firma la carta para uno NO definitivo a la Parota: http://tlachinollan.org/Noalaparota

Declaratoria III Aniversario Movimiento de resistencia contra la presa La Parota

El CONSEJO DE EJIDOS Y COMUNIDADES OPOSITORES A LA PRESA LA PAROTA (CECOP), declara:

Tres años de lucha y resistencia de los comuneros de los Bienes Comunales de Cacahuatepec, y de los ejidatarios de Los Huajes, Dos Arroyos y La Palma en contra de la construcción de la presa La Parota, nos acercan a los hombres y mujeres que, junto con el general Juan Dorantes nos dieron estas tierras que ahora trabajamos, que son fuente de vida, riqueza y desarrollo real para nosotros y para nuestros hijos.

En tres años de resistencia, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y los gobiernos, federal y estatal no han logrado su propósito de despojarnos de la tierra y del territorio que es nuestro, que fue de nuestros padres y será de nuestros hijos. No han logrado tampoco quitarnos el agua de nuestro Río Papagayo. Desde aquí les decimos a los del poder, que no les permitiremos consumar el despojo.

En estos tres años hemos visto cómo se manejan los que tienen el poder. Cómo la CFE, junto con el gobierno del estado, mueven a sus títeres, los viejos líderes corruptos de la Confederación Nacional Campesina (CNC) del PRI. Cómo sus lidercitos locales han comprado a los comisariados para que traicionen a sus pueblos.

Somos testigos, y lo hemos denunciado, que la Procuraduría Agraria, el Procede, los notarios, se vendieron a la CFE y declararon válidas las asambleas amañadas resguardadas por más de mil policías que impidieron el paso a los verdaderos comuneros y ejidatarios que nos oponemos a la presa. Hemos visto cómo algunos profesores desclasados de las universidades se han convertido en mecenarios. Cómo los gobernantes han comprado las conciencias de la mayoría de diputados, regidores y demás servidores públicos que sólo sirven como comparsas de la corrupción.

Pero también decimos a todos, que en estos tres años hemos demostrado la dignidad, el aplomo, la consistencia y la unidad de nuestra lucha. A nuestro movimiento de resistencia integramos la lucha legal: Sabemos ahora que nuestra Constitución nos respalda y que hay leyes nacionales e internacionales que detienen obligadamente a gobernantes prepotentes que piensan que nos van a avasallar impunemente.

Somos firmes en nuestras acciones: Tenemos demandados a los comisariados corruptos que, empujados por la CFE y el gobierno estatal, rompieron la legalidad y realizaron asambleas amañadas e ilegales, fuera de los núcleos agrarios y fuera del municipio, y creyeron que con la falsificación de firmas iban a vender nuestras tierras. Estas asambleas han sido objeto de denuncias a nivel nacional e internacional.

La Semarnat tiene que aclarar porqué aprobó la Manifestación de Impacto Ambiental, cuando no dice nada sobre sismicidad, sobre daños a la salud, sobre destrucción de fauna y flora ni sobre afectación de los mantos freáticos que dejarían sin agua al puerto de Acapulco.

La Procuraduría General de la República (PGR) tiene conformados los expedientes contra el Comisariado de Bienes Comunales por la falsificación de firmas en la asamblea del 25 de abril de 2004 y contra la CFE por delitos ambientales cometidos cuando entró a nuestras tierras sin permiso de la SRA, de la Semarnat, y desde luego, sin nuestro permiso, hace exactamente tres años. Por eso iniciamos nuestra lucha. Por eso sacamos la maquinaria de la CFE y expulsamos a sus funcionarios.

Nuestra lucha se fortaleció cuando conformamos, junto con los afectados de todo el país, el Movimiento Mexicano de Afectados por las Presas y en Defensa de los Ríos (MAPDER). Ampliamos nuestros conocimientos sobre los efectos devastadores que provocan las presas al participar en el Movimiento Mesoamericano contra las Represas y al formar parte de la Red Latinoamericana contra las Represas, por el Agua, los Ríos y sus Comunidades (REDLAR).

Nuestro movimiento ha ganado el reconocimiento y la solidaridad de organizaciones y de redes internacionales tales como FIAN Interncional, Coalición para el Habitat, Fundación por una Nueva Cultura del Agua de España, el MAB y Assemae de Brasil, Red Vida, Canadian Council, Vía Campesina, y organizaciones nacionales defensoras de los Derechos Humanos, Derechos Económicos Sociales, Culturales y Ambientales como Cemda, Tlachinollan, Prodh, Serapaz, el Espacio Desc, Imdec y, entre muchas otras, organizaciones como la Amap, Ucizoni, Rmalc, la Alianza Social Continental con quienes juntos enfrentamos la lucha contra la depredación y la rapiña ocasionadas por los megaproyectos de inversión.

EN ESTE III ANIVERSARIO NOS COMPROMETEMOS A DEFENDER NUESTROS MÁS APRECIADOS Y FUNDAMENTALES DERECHOS.

El Derecho a la Información y a la Consulta: Hace tres años, la CFE sin ninguna explicación, información, consulta, ni permiso alguno se metió a nuestras tierras y destrozó nuestros corrales para iniciar, lo que después supimos, que era la construcción de una presa. Este atropello lo denunciamos entonces, lo denunciamos ahora así como lo denunciamos ante la ONU y los demandamos ante las autoridades nacionales. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) tiene, ante la Procuraduría General de la República una denuncia penal por esta violación a las leyes agrarias, a la ley sobre el medio ambiente y al código penal federal.

Nuestro Derecho a la Libre Determinación fue violentado por la CFE y los gobiernos nacional y estatal: Han querido imponer La Parota por la fuerza, violando nuestros derechos a disponer libremente de nuestras riquezas y nuestros recursos naturales. Todo esto se traduce en la intención de despojarnos de nuestros medios de subsistencia. Están atentando directamente contra nuestra autonomía, contra nuestras raíces y costumbres. Han utilizado la represión, el asesinato y el encarcelamiento para despojarnos de nuestros recursos, y nuestro territorio y así desplazarnos fuera de nuestras comunidades.

El Tribunal Unitario Agrario No 41 con sede en Acapulco determinó la Nulidad de la asamblea fraudulenta del 23 de agosto de 2005, celebrada irregularmente fuera del núcleo agrario y fuera del municipio. A pesar de que posteriormente se decretó reponer el procedimiento, la CFE sigue actuando ilegalmente hostigando permanentemente a las comunidades que se oponen a la presa. Particularmente, la CFE apoyada por la policía estatal, ejerce presión en los ejidos, en tanto que están en curso las demandas de nulidad de las asambleas ilegales que realizaron, fuera de las comunidades y del municipio, resguardadas por cientos de policías que reprimieron a la población en los ejidos de Los Huajes, Dos Arroyos y La Palma.

Nuestros Derechos Humanos, Civiles y Políticos han sido violados: La realización de las asambleas fraudulentas ha sido acompañada del despliegue de cientos de policías. En el caso de los Bienes Comunales de Cacahuatepec, realizada en San Marcos, fuera del municipio de Acapulco, más de mil policías impidieron con toletes y gases lacrimógenos el paso a los opositores a la presa, que somos la mayoría de comuneros. Represión aún más agresiva se dio en contra de los ejidatarios de Dos Arroyos y Los Huajes, para impedir el paso a sus asambleas. Este clima de represión y hostilidad provocado por la CFE al romper el tejido social, ha llevado al asesinato de tres campesinos, dos opositores y un ejidatario afín a las autoridades ejidales.

Los Derechos Económicos, Sociales y Culturales de nuestras comunidades están amenazados: La CFE y los gobiernos, federal y estatal deben saber que no van a pasar por encima de nuestros derechos a la Alimentación, a la Salud, la Educación, a la Tierra y al Agua. Somos campesinos que defendemos nuestras tierras. Seguiremos en esta lucha, y seguiremos siendo campesinos. Esta es nuestra decisión y este es nuestro derecho.

Defendemos nuestros Derechos Ambientales, el agua y la biodiversidad existente en nuestro territorio: El Veredicto del Tribunal Latinoamericano del Agua exige CANCELAR el Proyecto Hidroeléctrico La Parota. Denuncia que este proyecto viola la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la Ley de Equilibrio Ecológico y del Medio Ambiente, la Ley de Aguas Nacionales y la Ley General de Salud. Señala violación del Art. 27 Constitucional al afectar derechos jurídicos de los núcleos agrarios, ejidales y comunales y denuncia carencias y falsedades en la Manifestación de Impacto Ambiental.

El Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la ONU, el 19 de mayo de 2006, emitió las siguientes recomendaciones para el Caso Presa La Parota: El Comité encargado de vigilar la aplicación del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC) recomienda:

1.- (Párrafo 28). Urge al Estado Mexicano que consulte adecuadamente a las comunidades campesinas e indígenas que puedan ser afectadas por estas megaobras.
2.- Exige se garantice el previo consentimiento informado de las comunidades en cualquier proceso de toma de decisiones relacionado con proyectos que afecten sus derechos reconocidos en el PIDESC.
3.- Urge al Estado Mexicano reconocer los derechos de propiedad y posesión de las comunidades sobre las tierras que tradicionalmente ocupan. Pide al Estado Mexicano referirse de forma especial a las observaciones generales 14 y 15 del PIDESC que detallan el derecho al nivel más alto de salud y derecho al agua.

Es necesario redoblar esfuerzos en la defensa de nuestros derechos más elementales, y a la vez continuar elevando el nivel de conciencia alcanzado por nuestro movimiento. Se requiere de un espacio de mayor diálogo y afianzar nuestra identidad cultural, nuestras raíces y tradiciones, por lo que, en este encuentro por el Diálogo, la Resistencia y la Identidad, en el III ANIVERSARIO DEL MOVIMIENTO DE RESISTENCIA CONTRA LA PRESA LA PAROTA acordamos:

I. Nuestro movimiento, conducido por el CECOP, dará pasos firmes para recomponer el tejido social que vino a romper la CFE en nuestro territorio al entrar a nuestras tierras y tratar de imponer unilateralmente la presa La Parota. Debemos dar fin a los enfrentamientos entre comunidades y aún entre familias por diferencias que tienen que ver con el rechazo a la expropiación de nuestras tierras para la construcción de la presa.

Daremos inicio a un diálogo entre comuneros y ejidatarios de una y otra posición; para lo cual pediremos la intervención de un mediador de la más alta y reconocida calidad moral que conduzca el diálogo y nos lleve a alcanzar la paz social en nuestros pueblos.

II. Profundizar la recuperación de nuestra identidad indígena, nuestra cultura y nuestra historia. Exigiremos por la vía legal, que la CFE entregue las piezas arqueológicas que extrajo de nuestro territorio, cuando en 2003, comenzó a tirar cerros, abrir brechas, y cavar túneles y socavones. Abriremos un museo de sitio y convocaremos a antropólogos e investigadores para estudiar los sitios arqueológicos existentes a la orilla del Río Papagayo y recuperar lo que durante centurias fue el paso del comercio precortesiano entre el altiplano y Acapulco.

Recuperamos la figura del Consejo de Principales en cada uno de nuestros pueblos y promoveremos el estudio de la lengua Náhuatl, como nuestra lengua materna, que es la que hablan nuestras abuelas y abuelos y que nos ha sido enajenada por las políticas gubernamentales de integración étnica.

III. Para nuestros pueblos, para los ejidatarios y comuneros de estos territorios, el Proyecto Hidroeléctrico Presa La Parota ESTÁ CANCELADO.

La decisión de nuestro pueblo ha sido retomada por cientos de organizaciones en México, Latinoamérica y en todo el mundo. Exigimos a las autoridades de todos los niveles que respeten esta decisión de los pueblos. Ya lo hicimos saber en carta dirigida al presidente de la República; le exigimos respeto a la voluntad de miles de campesinos que no estamos dispuestos a ser objeto del despojo.

Esta es la decisión de la mayoría de los 25 mil campesinos amenazados por el desalojo y de los 75 mil campesinos cuyas tierras quedarían desertificadas río abajo.

En este Tercer Aniversario de nuestro movimiento decimos a las organizaciones fraternas y a los pueblos de México y el mundo, que no vamos a permitir el despojo. No van a sacarnos de nuestras tierras ni van a manchar con sangre nuestro territorio y nuestra historia. La tierra y el agua del Río Papagayo son nuestra vida.

Aguacaliente, Bienes Comunales de Cacahuatepec,
Acapulco, Gro, 28 de julio de 2006.

¡LA TIERRA NO SE VENDE!

CONSEJO DE EJIDOS Y COMUNIDADES OPOSITORES A LA PRESA
LA PAROTA (CECOP).

http://www.comda.org.mx/declaratoria-iii-aniversario-movimiento-de-resistencia-contra-la-presa-la-parota-junio-2006/

Declaratoria III Aniversario Movimiento de resistencia contra la presa La Parota

EL CONSEJO DE EJIDOS Y COMUNIDADES OPOSITORES A LA PRESA LA PAROTA (CECOP), declara:

Tres años de lucha y resistencia de los comuneros de los Bienes Comunales de Cacahuatepec, y de los ejidatarios de Los Huajes, Dos Arroyos y La Palma en contra de la construcción de la presa La Parota, nos acercan a los hombres y mujeres que, junto con el general Juan Dorantes nos dieron estas tierras que ahora trabajamos, que son fuente de vida, riqueza y desarrollo real para nosotros y para nuestros hijos.

En tres años de resistencia, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y los gobiernos, federal y estatal no han logrado su propósito de despojarnos de la tierra y del territorio que es nuestro, que fue de nuestros padres y será de nuestros hijos. No han logrado tampoco quitarnos el agua de nuestro Río Papagayo. Desde aquí les decimos a los del poder, que no les permitiremos consumar el despojo.

En estos tres años hemos visto cómo se manejan los que tienen el poder. Cómo la CFE, junto con el gobierno del estado, mueven a sus títeres, los viejos líderes corruptos de la Confederación Nacional Campesina (CNC) del PRI. Cómo sus lidercitos locales han comprado a los comisariados para que traicionen a sus pueblos.

Somos testigos, y lo hemos denunciado, que la Procuraduría Agraria, el Procede, los notarios, se vendieron a la CFE y declararon válidas las asambleas amañadas resguardadas por más de mil policías que impidieron el paso a los verdaderos comuneros y ejidatarios que nos oponemos a la presa. Hemos visto cómo algunos profesores desclasados de las universidades se han convertido en mecenarios. Cómo los gobernantes han comprado las conciencias de la mayoría de diputados, regidores y demás servidores públicos que sólo sirven como comparsas de la corrupción.

Pero también decimos a todos, que en estos tres años hemos demostrado la dignidad, el aplomo, la consistencia y la unidad de nuestra lucha. A nuestro movimiento de resistencia integramos la lucha legal: Sabemos ahora que nuestra Constitución nos respalda y que hay leyes nacionales e internacionales que detienen obligadamente a gobernantes prepotentes que piensan que nos van a avasallar impunemente.

Somos firmes en nuestras acciones: Tenemos demandados a los comisariados corruptos que, empujados por la CFE y el gobierno estatal, rompieron la legalidad y realizaron asambleas amañadas e ilegales, fuera de los núcleos agrarios y fuera del municipio, y creyeron que con la falsificación de firmas iban a vender nuestras tierras. Estas asambleas han sido objeto de denuncias a nivel nacional e internacional.

La Semarnat tiene que aclarar porqué aprobó la Manifestación de Impacto Ambiental, cuando no dice nada sobre sismicidad, sobre daños a la salud, sobre destrucción de fauna y flora ni sobre afectación de los mantos freáticos que dejarían sin agua al puerto de Acapulco.

La Procuraduría General de la República (PGR) tiene conformados los expedientes contra el Comisariado de Bienes Comunales por la falsificación de firmas en la asamblea del 25 de abril de 2004 y contra la CFE por delitos ambientales cometidos cuando entró a nuestras tierras sin permiso de la SRA, de la Semarnat, y desde luego, sin nuestro permiso, hace exactamente tres años. Por eso iniciamos nuestra lucha. Por eso sacamos la maquinaria de la CFE y expulsamos a sus funcionarios.

Nuestra lucha se fortaleció cuando conformamos, junto con los afectados de todo el país, el Movimiento Mexicano de Afectados por las Presas y en Defensa de los Ríos (MAPDER). Ampliamos nuestros conocimientos sobre los efectos devastadores que provocan las presas al participar en el Movimiento Mesoamericano contra las Represas y al formar parte de la Red Latinoamericana contra las Represas, por el Agua, los Ríos y sus Comunidades (REDLAR).

Nuestro movimiento ha ganado el reconocimiento y la solidaridad de organizaciones y de redes internacionales tales como FIAN Interncional, Coalición para el Habitat, Fundación por una Nueva Cultura del Agua de España, el MAB y Assemae de Brasil, Red Vida, Canadian Council, Vía Campesina, y organizaciones nacionales defensoras de los Derechos Humanos, Derechos Económicos Sociales, Culturales y Ambientales como Cemda, Tlachinollan, Prodh, Serapaz, el Espacio Desc, Imdec y, entre muchas otras, organizaciones como la Amap, Ucizoni, Rmalc, la Alianza Social Continental con quienes juntos enfrentamos la lucha contra la depredación y la rapiña ocasionadas por los megaproyectos de inversión.

EN ESTE III ANIVERSARIO NOS COMPROMETEMOS A DEFENDER NUESTROS MÁS APRECIADOS Y FUNDAMENTALES DERECHOS.

El Derecho a la Información y a la Consulta: Hace tres años, la CFE sin ninguna explicación, información, consulta, ni permiso alguno se metió a nuestras tierras y destrozó nuestros corrales para iniciar, lo que después supimos, que era la construcción de una presa. Este atropello lo denunciamos entonces, lo denunciamos ahora así como lo denunciamos ante la ONU y los demandamos ante las autoridades nacionales. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) tiene, ante la Procuraduría General de la República una denuncia penal por esta violación a las leyes agrarias, a la ley sobre el medio ambiente y al código penal federal.

Nuestro Derecho a la Libre Determinación fue violentado por la CFE y los gobiernos nacional y estatal: Han querido imponer La Parota por la fuerza, violando nuestros derechos a disponer libremente de nuestras riquezas y nuestros recursos naturales. Todo esto se traduce en la intención de despojarnos de nuestros medios de subsistencia. Están atentando directamente contra nuestra autonomía, contra nuestras raíces y costumbres. Han utilizado la represión, el asesinato y el encarcelamiento para despojarnos de nuestros recursos, y nuestro territorio y así desplazarnos fuera de nuestras comunidades.

El Tribunal Unitario Agrario No 41 con sede en Acapulco determinó la Nulidad de la asamblea fraudulenta del 23 de agosto de 2005, celebrada irregularmente fuera del núcleo agrario y fuera del municipio. A pesar de que posteriormente se decretó reponer el procedimiento, la CFE sigue actuando ilegalmente hostigando permanentemente a las comunidades que se oponen a la presa. Particularmente, la CFE apoyada por la policía estatal, ejerce presión en los ejidos, en tanto que están en curso las demandas de nulidad de las asambleas ilegales que realizaron, fuera de las comunidades y del municipio, resguardadas por cientos de policías que reprimieron a la población en los ejidos de Los Huajes, Dos Arroyos y La Palma.

Nuestros Derechos Humanos, Civiles y Políticos han sido violados: La realización de las asambleas fraudulentas ha sido acompañada del despliegue de cientos de policías. En el caso de los Bienes Comunales de Cacahuatepec, realizada en San Marcos, fuera del municipio de Acapulco, más de mil policías impidieron con toletes y gases lacrimógenos el paso a los opositores a la presa, que somos la mayoría de comuneros. Represión aún más agresiva se dio en contra de los ejidatarios de Dos Arroyos y Los Huajes, para impedir el paso a sus asambleas. Este clima de represión y hostilidad provocado por la CFE al romper el tejido social, ha llevado al asesinato de tres campesinos, dos opositores y un ejidatario afín a las autoridades ejidales.

Los Derechos Económicos, Sociales y Culturales de nuestras comunidades están amenazados: La CFE y los gobiernos, federal y estatal deben saber que no van a pasar por encima de nuestros derechos a la Alimentación, a la Salud, la Educación, a la Tierra y al Agua. Somos campesinos que defendemos nuestras tierras. Seguiremos en esta lucha, y seguiremos siendo campesinos. Esta es nuestra decisión y este es nuestro derecho.

Defendemos nuestros Derechos Ambientales, el agua y la biodiversidad existente en nuestro territorio: El Veredicto del Tribunal Latinoamericano del Agua exige CANCELAR el Proyecto Hidroeléctrico La Parota. Denuncia que este proyecto viola la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la Ley de Equilibrio Ecológico y del Medio Ambiente, la Ley de Aguas Nacionales y la Ley General de Salud. Señala violación del Art. 27 Constitucional al afectar derechos jurídicos de los núcleos agrarios, ejidales y comunales y denuncia carencias y falsedades en la Manifestación de Impacto Ambiental.

El Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la ONU, el 19 de mayo de 2006, emitió las siguientes recomendaciones para el Caso Presa La Parota: El Comité encargado de vigilar la aplicación del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC) recomienda:

1.- (Párrafo 28). Urge al Estado Mexicano que consulte adecuadamente a las comunidades campesinas e indígenas que puedan ser afectadas por estas megaobras.
2.- Exige se garantice el previo consentimiento informado de las comunidades en cualquier proceso de toma de decisiones relacionado con proyectos que afecten sus derechos reconocidos en el PIDESC.
3.- Urge al Estado Mexicano reconocer los derechos de propiedad y posesión de las comunidades sobre las tierras que tradicionalmente ocupan. Pide al Estado Mexicano referirse de forma especial a las observaciones generales 14 y 15 del PIDESC que detallan el derecho al nivel más alto de salud y derecho al agua.

Es necesario redoblar esfuerzos en la defensa de nuestros derechos más elementales, y a la vez continuar elevando el nivel de conciencia alcanzado por nuestro movimiento. Se requiere de un espacio de mayor diálogo y afianzar nuestra identidad cultural, nuestras raíces y tradiciones, por lo que, en este encuentro por el Diálogo, la Resistencia y la Identidad, en el III ANIVERSARIO DEL MOVIMIENTO DE RESISTENCIA CONTRA LA PRESA LA PAROTA acordamos:

I. Nuestro movimiento, conducido por el CECOP, dará pasos firmes para recomponer el tejido social que vino a romper la CFE en nuestro territorio al entrar a nuestras tierras y tratar de imponer unilateralmente la presa La Parota. Debemos dar fin a los enfrentamientos entre comunidades y aún entre familias por diferencias que tienen que ver con el rechazo a la expropiación de nuestras tierras para la construcción de la presa.

Daremos inicio a un diálogo entre comuneros y ejidatarios de una y otra posición; para lo cual pediremos la intervención de un mediador de la más alta y reconocida calidad moral que conduzca el diálogo y nos lleve a alcanzar la paz social en nuestros pueblos.

II. Profundizar la recuperación de nuestra identidad indígena, nuestra cultura y nuestra historia. Exigiremos por la vía legal, que la CFE entregue las piezas arqueológicas que extrajo de nuestro territorio, cuando en 2003, comenzó a tirar cerros, abrir brechas, y cavar túneles y socavones. Abriremos un museo de sitio y convocaremos a antropólogos e investigadores para estudiar los sitios arqueológicos existentes a la orilla del Río Papagayo y recuperar lo que durante centurias fue el paso del comercio precortesiano entre el altiplano y Acapulco.

Recuperamos la figura del Consejo de Principales en cada uno de nuestros pueblos y promoveremos el estudio de la lengua Náhuatl, como nuestra lengua materna, que es la que hablan nuestras abuelas y abuelos y que nos ha sido enajenada por las políticas gubernamentales de integración étnica.

III. Para nuestros pueblos, para los ejidatarios y comuneros de estos territorios, el Proyecto Hidroeléctrico Presa La Parota ESTÁ CANCELADO.

La decisión de nuestro pueblo ha sido retomada por cientos de organizaciones en México, Latinoamérica y en todo el mundo. Exigimos a las autoridades de todos los niveles que respeten esta decisión de los pueblos. Ya lo hicimos saber en carta dirigida al presidente de la República; le exigimos respeto a la voluntad de miles de campesinos que no estamos dispuestos a ser objeto del despojo.

Esta es la decisión de la mayoría de los 25 mil campesinos amenazados por el desalojo y de los 75 mil campesinos cuyas tierras quedarían desertificadas río abajo.

En este Tercer Aniversario de nuestro movimiento decimos a las organizaciones fraternas y a los pueblos de México y el mundo, que no vamos a permitir el despojo. No van a sacarnos de nuestras tierras ni van a manchar con sangre nuestro territorio y nuestra historia. La tierra y el agua del Río Papagayo son nuestra vida.

Aguacaliente, Bienes Comunales de Cacahuatepec,
Acapulco, Gro, 28 de julio de 2006.

¡LA TIERRA NO SE VENDE!

CONSEJO DE EJIDOS Y COMUNIDADES OPOSITORES A LA PRESA
LA PAROTA (CECOP).